5 de junio de 2012

Ingenuidad VS Realidad

Os prometí 'tol remember' y allá que vamos.
Hoy vuelvo a desarmar mi memoria para compartir con la red mis anécdotas mas privadas.
Hablemos pues de la primera vez que quede con un chico que conocí por Internet.
Y para comprobar como te va cambiando el tiempo, vamos a ver la reacción que tuve en su momento (En Rojo) ante determinadas situaciones y cual es la que tendría a día de hoy. (En Verde)
Antes de quedar por primera vez, a mi eso me daba mucho reparo, estaba absolutamente convencido de que era arriesgadísimo, y de que te exponías a acabar cortado en trozitos y metido en botes de formol; una vez le coges el truqui ya no piensas en si te va a matar, piensas en lo pesado que se te va a hacer el  rato.

Bueno, que me desvío, corría por aquel entonces el 30 de Diciembre de 2009, no ha llovido ni ná, hablando de llover, ese día llovía a mares. 
No os penséis que llevaba hablando con Mateo mucho tiempo, para nada, le conocí el día anterior, pero vete tu a saber porque me dio mucha confianza, me transmitió buen rollo. 

En su momento tal acontecimiento me desveló la noche anterior casi por completo; a día de hoy con un cigarrito se me pasan los nervios.

Mateo llegó alrededor de 30 minutos tarde, hacía frío, llovía:
- Pobrecito, seguro que ha pillado un atasco enorme o quizá se haya parado el metro. Esperaré aquí sentado a que llegue mi futuro príncipe.

- Eeeeh ¿De que vas? 15 minutos de cortesía y vas que te matas maricón. Yo me piro, total, vas a ser un cuadro de comedor, eso que me ahorro.


Imagen real realizada mientras esperaba a que llegara, pensando que con el tiempo la encontraría  romántica y esperanzadora.
Dios, era anormal.


Mateo decidió por mi que íbamos al Burguer King:
- Oh que amable, así no me hace pensar a mí, es tan bueno.

- Tronco, pregúntame si me renta o no. ¿No? A lo mejor soy vegetariano o simplemente quizá odie las hamburguesas. 

Mateo describió a su familia como si fuera la de Los Increíbles:
- Jope, que tío tan interesante, fíjate que curiosas profesiones, seguro que tiene cientos de anécdotas para contar.

- ¿Me estará vacilando? Como siga así le digo que mi padre también es astronauta y me quedo mas ancho que largo. Si empezamos así, seguro que tiene cientos de trolas mas para contar.



Mateo hablaba mucho de su reciente ex-novio y de la buena relación que guardaba con el:
- Si es que este chico es grande, lo deja con el novio y siguen hablando todos los días con ese buen rollo de colegas. Que genial.

- Mira guapito de cara, que será un Sol y estupendo y maravilloso, pero me estás conociendo a mi, asi que si te parece... para hablar del otro llamas a tu Mariliendre, pero a mi no me toques las pelotas.

Mateo conoció a otro chico antes que a mi con el que luego, se suponía que no surgió nada mas:
- Que tonto el otro... anda que dejar a escapar a Mateo... hay que ser bobo.

No me creo nada, eso de entrada y para proseguir, si quieres jugar a dos bandas, te echas una partidica de Parchis online. 
Me apetece muchisimo ir a ver Bienvenidos a Zombiland.  Dijo él.
-¿Te apetece ir esta tarde?. Añadió.
Claro que sí. Contesté.
Habían pasado menos de 24 horas desde que la había descargado y visto desde casa. Locuras por amor.
Le cogí manía a la película. Queda justificado, creo.

Mateo decidió que nos debíamos dejar de ver una temporada porque estaba de exámenes:
- Que responsable, voy a intentar darle lo menos posible el coñazo para que no me odie, pero le voy a echar tanto de menos. Jo, como sufro por él. Lloro.


- ¿2 meses seguidos de exámenes? ¿Donde estudias tu, chico? Seguro que se ha decantado por el otro chaval y ale... a otra cosa butterfly. 
Eso sí, presumía mucho de ser una persona muy clara y cristalina...




Ay querid@s... desconfiad siempre de las personas que el 2º día se califican con especial impetú de alguna característica, porque probablemente eso, es lo último que sean.
No volví a ver a Mateo hasta que no quiso la casualidad y para entonces yo ya no era gilipollas.
P.D.:
Querido Mateo, si termina usted leyendo esto, sepa que no le guardo ningún tipo de rencor. 
Fueron necesarias aquellas incesables lloreras para ahora ser mucho mas dífícil de inmutar.
A parte de eso, gracias a usted y a una entramada red de casualidades, es altamente probable que de no haberle conocido, el destino no me hubiera llevado a conocer a la gente que ahora forma parte de mi vida.
Gracias, en el fondo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario