Casa de Campo [Vol. 2]

Y cerramos este caluroso y estival mes de Junio, con la segunda entrada de mi querida y apreciada Casa de Campo.

Si ya hablamos el día anterior sobre biciclistas ciclistas y demás atletas varios hoy nos metemos de lleno con  3 grupos mucho mas originales, transgresores y rebeldes.

Domingueros.
Ir a la Casa de Campo en Domingo es prácticamente equivalente a ir al Primark del Isla Azul, llega un momento en el que dudas de si has cogido un avión y has cambiado de país.
Y no me entiendan mal, que lo digo con todo el respeto del mundo; pero claro, tu llegas, con tu bici, tus ganas de despejarte, de respirar aire puro... y cuando no te cruzas con 7 niños, te viene una humareda de algun guiso del cual es preferible no saber los ingredientes.

- Oiga señora mía, pase usted el domingo como le venga en gana, pero controleme a los retoños, que el día menos pensando te le atropellan.
- Ya... ya se que tiene 5 mas, pero mujer, pudiendolo evitar...


En un reportaje de Callejeros vi también como celebraban bodas, en persona no lo he visto nunca, pero vamos, el día que lo vea, me bajo de la bici y me pido un whiskazo corrrrrrrrrtito.
De todas maneras el nivel de vulgaridad para festejar tus recién estrenadas nupcias en la Casa de Campo es de farmacia juzgado de guardia.

Lo peor de todo eso, es como te encuentras la zona el lunes, que parece que ha pasado un ejercito de Pocholos pequeñitos. Una locura, pero bueno eso no lo limpio yo.

Prostitutas.
Antes de que cerraran el 80% del tráfico de la Casa de Campo, habia muchísima mas variedad; ahora tampoco se vayan a pensar ustedes que hay mucho donde elegir. Aunque siempre predominaron las de raza negra.

Me acuerdo cuando era yo pequeñito e ibas montado en el coche, con toda tu ingenuidad y bondad infantil cuando de repente te veías venir un par de mulatas que se ve que algo querían, aunque no tenía muy claro el que.
La peor parte venia cuando ya era de noche; el poder del camuflaje... porque entre la oscuridad y el tono de piel de nuestras amigas lo único que veías era como levitaba un bikini fosforito, y tu te debatías entre instar a tu padre para que acelerara o llamar a los Cazafantasmas. Un horror.

¿Es un pájaro, es un avión?

A dia de hoy, entre la crisis y que no pasan coches, las pobres mujeres que hay ahi, cumplen el mismo perfil que las que te puedas encontrar en la charcutería de la esquina.
Aunque lo que nunca cambia es el kit imprescindible de prostituta: Perfume del Ahorra Mas, toallitas húmedas y condones subvencionados.


Cruisingeros.
Si buscas Cruising en Google, la primera acepción que encuentras es:
Cruising: es una película policíaca estadounidense del año 1980, dirigida por William Friedkin e interpretada por Al Pacino y Paul Sorvino.

JA! Es todo una vil y cochina mentira.
Porque realmente el cruising es:
Práctica sexual consistente en mantener relaciones sexuales en lugares públicos, generalmente de forma anónima y sin ataduras.
Lo mas gracioso es lo de 'sin ataduras', ¿de verdad alguien pensaba que después de pasar la tarde practicando el coito anal a la sombra de los pinos se iban a casar al día siguiente?
Y lo peor... lo de 'de forma anónima', me encantaría saber como se inicia ese tipo de actividades.


-  Hola
+ Hola
- Venga chupa.

Imagino que sería algo así, no lo se. Lo que llaman 'libertad sexual' del siglo XXI no esta hecha para mi, ni mucho menos para que yo la entienda.
Y por experiencia personal si puedo contar un par de anécdotas sobre este tipo de espécimen.
La primera fue muy muy extraña, porque había ahí un remix de géneros y operaciones de cirugia que ni la Cher.
Lo que yo vi, o creí ver, exactamente fue, veamos... a ver como lo digo para que suene fino y elegante...
Un tío con tetas le estaba metiendo tol rabaco a otro. Oh de verdad, soy el maestro de la sutileza.
Pues si, como os lo cuento, ahí, entre unos matorrales, entre insectos y hierba seca. Tremendo.


La segunda vez fue bastante mas normal, bueno... comparado con la primera cualquier cosa hubiera sido mas normal.
Un par de ciclistas, que debían estar cansados de pedalear y se pararon, se apartaron prudentemente 10 metros del camino y se estaban comiendo los pitos. Sin quitarse si quiera el casco eh... algo rapidito, que imagino que la esposa estaría en casa haciendo unos san jacobos para cenar y eso recalentado luego esta muy malo.


En fin. Yo con todo el amor del mundo quiero dar mi opinión sobre este último grupo y bueno, lo puedo sintetizar en que me dan asco, repulsión, aversión y que moralmente se sitúan en una de las escalas mas bajas de la sociedad.
Me es muy complicado, por no decir imposible respetar a la gente que no se respeta a si misma.
Porque si hay libertad para hacer eso también hay libertad para opinar. ¿O no?


Y eso es todo amigos. A ver si no vuelvo a tardar en actualizar tantos días... aunque este fin de semana es el Orgullo, así que quizá haga una post-reflexión sobre lo acontecido.




P.D: Reportaje de Callejeros: 1º parte. Las demás partes las buscáis vosotros que no me apetece. Han pasado ya 5 años desde que se hizo y ha cambiado un poco, pero bueno para haceros una idea...